Así es, la maravillosa Dirección General de Tráfico, maravillosamente dirigida por San
Pere, protector de las víctimas de los accidentes de Tráfico, ha decidido endurecer los
exámenes para conseguir el
carnet de conducir para motos a los adolescentes irresponsables. En la foto vemos una de las nuevas pruebas que se han diseñado para estos imberbes, en la que solo tienes 2 opciones:
1. La pasas y te dan el codiciado
carnet, después de haber demostrado debidamente y sin lugar a dudas que eres "el/la rey/reina de las motos".
2. Te caes por el barranco y con suerte, si sobrevives, tienes opción a hacer un nuevo examen, después de curarte de las múltiples heridas
contraídas en la
caída.
Este tipo de examen sólo se aplicará a personas sin cargas familiares, es decir, solteros sin hijos o menores a su cargo, por motivos obvios (la Seguridad Social no tendría la solvencia económica necesaria para sufragar todos los gastos que se
preven, puedan producir las
caídas).
Así que ya lo
sabéis, hasta que
tengáis hijos será mejor que no
intentéis sacar el
carnet de moto, a no ser que
tengáis habilidades suficientes para poder actuar en un circo por lo menos.
Y estos son los nuevos radares que han sido diseñados para nuestra seguridad en las rectas de las carreteras españolas (nunca he visto un radar en otra ubicación).
Así es, este nuevo tipo de radar ha demostrado ser de lo mas eficiente, en cuanto el conductor es "cazado" por la "agente" (
véase la foto), esta paloma
recibirá en su casco las coordenadas del domicilio del infractor, y rauda se dirigirá a dicho domicilio, donde entregará la pertinente foto y la correspondiente multa, emitida por el propio radar, con lo que se evitarán los retrasos en la entrega de las multas al denunciado, agilizando
así el servicio de Correos del país.
En el caso de que el denunciado sea extranjero, se
dirigirá a la frontera, donde se encontrará con otra paloma (francesa, portuguesa o marroquí) a la que le
cederá la multa en
cuestión, y
procederá con el mismo sistema para que el denunciado la reciba en cuanto vuelva a su hogar.
La
DGT ha alabado el sistema por la rapidez y por lo que supone en
términos de cuidado del medio ambiente.
Las asociaciones de usuarios han protestado (como siempre) aludiendo que los excrementos de las citadas palomillas son muy corrosivos y que destrozan la pintura de los coches.
Cosas
veredes.